Este año ha dejado huella en la vida de todas, la Navidad del 2020 viene llena de muchos significados emocionales, religiosos, sociales y va a ser muy diferente.
Muchas familias han tenido pérdidas en este año 2020, muchas han perdido además de familiares trabajos, planes o las rutinas a las que estábamos acostumbrados.
Hace unas semanas le pregunté a mi familia que planes haríamos para Navidad, entre las instrucciones del gobierno de no hacer reuniones, el que mi esposo y yo entramos en población de riesgo, perdimos a la madre de mi esposo en Marzo, en fin, y el cansancio de aguantar estos meses limitandonos en todos sentidos.
Actualmente mis hijas no tienen mucho entusiasmo por la Navidad, siendo que en años anteriores a estas fechas ya estaban planeando sacar adornos. No pienso forzar nada porque han sido muchos meses empujando y todos estamos muy muy cansados en todos sentidos.
También tengo contactos que ya están totalmente en el mood navideño, algunas ya hasta poniendo el árbol y planeando actividades navideñas para su familia.
Y ambas posturas están bien, no debemos de pensar que “tenemos” que hacer actividades de Navidad si no nos nace, si sentimos o acordamos que este año estaremos en casa tranquilos recuperándonos de todos los sucesos del año es perfecto, nos lo debemos permitir por salud mental y de nuestra familia.
Y si también por salud mental de tu familia, por que tus niñas están muy ilusionadas, por la razón que sea deciden estar de navidad desde ya, hacer adviento, elf in the shelf, ver maratón de películas navideñas o lo que decidan es perfecto y no necesitas justificarte con nadie.
Si deciden hacer una cena por todo lo alto sólo para ustedes, hacer una videollamada con la familia, decorar, abrir algunos regalos, es una excelente idea.
Si deciden encargar algo para no trabajar nada ese día, se la pasan mirando pelis o series o recuperando sueño perdido, y funciona para ustedes es perféctamente válido.
Es duro no poder reunirse, no poder abrazar, tal vez privarnos de salidas o de ir a comprar por no ir a aglomerciones, las personas creyentes privarnos de ir a la iglesia (yo personalmente no pienso pararme en la iglesia hasta que estemos en amarillo por lo menos, y si lo resiento pero es mejor esperar y seguir con salud el mayor tiempo posible.) También es duro esta Navidad por la cantidad de duelos que traemos a cuestas, familiares, proyectos, salidas, todos los planes para este año.
Pero sobreviviremos, cerraremos este año y seguiremos saliendo adelante como generaciones anteriores han sobrevivido a muchos otros eventos y el año 2021 es un nuevo comienzo para todos.