Ser mamá es ser experta en sentirse culpable, la educación que hemos recibido nos hace sentir que no hacemos “lo máximo” o que no somos “lo suficientemente” delgadas, o exitosas, o adecuadas.
Este modelo de mujer perfecta y siempre al 100% puede afectar seriamente la autoestima de una mamá inexperta.
La anécdota preferida para hacerte sentir culpable de mi mamá era una vecina de mi abuelita -si de mi abuelita de 94 años- que cuando era joven le contaba que la señora tenía 5 hijos, que se levantaba a las 5 de la mañana a lavar a mano y a las 12 del día ya tenía su comida hecha, sus carpetas y cortinas almidonadas.
Para hacerme entrar en razón de que yo de que me quejaba de estar cansada de mi poca habilidad cocinando y mi poco gusto por las labores del hogar, que, efectivamente yo limpio, lavo y demás pero no son mis actividades preferidas, y para mas agravío mi esposo hace buena parte de las tareas domésticas lo que hace que quede yo todavía en peor posición ante sus ojos (y los de mi suegra y mi cuñada) .
Y si no es la casa, es la receta maravillosa de muffins decorados que vimos en pinterest, y que no te salen, o por no comer lo suficientemente orgánico ni hornear tu propio pan y criar tus gallinas, o la amiga de facebook que publica los 50 Kilómetros que corre a las 5 de la mañana.
Si trabajamos fuera de casa, mas culpa, por que en ocasiones disfrutamos enormemente de nuestro trabajo, pero también nos hace falta estar con nuestros hijos y se vive dividida y constantemente, mal por disfrutar el trabajo ya que una buena madre sólo piensa en sus hijos.
Si decides y puedes dedicarte a tu casa 100% y lo disfrutas, también muchas veces sientes que “deberías estar haciendo algo mas” Si emprendes desde casa también salen cantidad de cosas que te hacen sentir “no-tan-buena” como las demás a tu alrededor, que también, secretamente se sienten igual.
Si escolarizas, te sientes culpable por no hacer homeschool, o por algo mas seguramente, si haces homeschool te sientes culpable por no ser tan dedicada como otras mamás, si estás entre dos mundos como yo, que tengo una fuera del sistema y otra escolarizada que ama su escuela, bueno, ni te cuento.
Maternar es una carrera larga, de años, como un largo maratón, que no sabemos hacia donde vamos y hay días que son especialmente pesados y cuesta arriba, y obviamente también nos sentimos inadecuadas, días que se nos termina la paciencia o los recursos o que se nos patina algo y terminamos actuando de una forma incorrecta, o simplemente hartas y sintiéndonos mal por sentirnos hartas.
Afortunadamente ahora tenemos una gran variedad de recursos, que podemos usar tanto para buscar retroalimentación como para sentirnos culpables si no los usamos con cuidado, internet, los libros y los medios ahora nos tienen tan sobre informados que en ocasiones necesitamos hacer un alto para retomar el rumbo.
Selecciona tu información
y adáptala a tu estilo de crianza, y a tu vida en general, las personas no somos clones, hay infinidad de familias, de estilos de vida, de lugares y de situaciones, ni la vida ni la crianza son un “check list”, uno comparte experiencias en un blog con la finalidad de tratar de ayudar con su experiencia, no por que todos deban vivir igual que uno.
Las mamás que escribimos blogs no vamos a escribir sobre los platos sucios, la lavadora descompuesta o nuestros peores días, por que normalmente queremos compartir, ayudar e inspirar a otras mamás, pero eso no debe servir como motivo de mas estres o angustia.
Conoce a tus hijos y conócete a tí
A veces leemos que los hijos de fulanita van a karate, gimnasia y natación, pero tal vez nuestro hijo no le guste y prefiera clases de origami, o los hijos de otra conocida pasen horas sentaditos modelando en arcilla y al nuestro hay que bajarlo de los árboles por que necesita mucho aire y movimiento.
Nosotras mismas, puede ser que nuestra amiga corra y su mejor hora sean las 4 de la mañana, pero habemos gente que no somos personas hasta que el sol este mas alto en el cielo, sería cosa de ver que nos gusta a nosotras y que va con nuestro estilo de vida y carácter, pero a veces por estar enfocadas en ver el pasto del vecino no vemos lo que tenemos.
Por Dios, no te compares
Si, puede ser que creas que la vida de la vecina o de fulanita es perfecta, ¿y? ¿que ganas comparándote?? si te das cuenta lo que estás haciendo simplemente es ponerle lastre a tu propia nave.
Todos tratamos de mostrar nuestra mejor cara, todos tenemos problemas y demonios personales con los que lidiamos, todos tratamos de hacerlo lo mejor posible, concéntrate en tí y en tu vida, en que quiero, que tengo y con lo que tengo que puedo hacer.
Te recomiendo este ejercicio, haz una lista de tus 10 mejores cualidades, te aseguro que si te pido una lista de tus 10 defectos la llenas y duplicas, así nos han enseñado a ser, pero no, siéntate, concéntrate y escribe tus cualidades y sé que te va a costar trabajo por que no nos enseñan a verlas.
¿Ya las tienes? perfecto, no son ni menos ni mas que las de cualquiera, son UNICAS como tu misma.
Si algo no está bien, ¡cámbialo!
Te sientes mal por que “deberías” hacer ejercicio, es por que “todas lo hacen” o por que sabes que así bajarás de peso, tendrás menos estress y es algo que te pide tu cuerpo, tal vez este de moda correr , pero lo tuyo es nadar, o el yoga o alguna otra cosa. Si hay algo que realmente deseas hacer, necesitas salir de tu “zona de confort” y de estar dándole vueltas a la culpa y hay que intentarlo.
La vida no es perfecta, las mamás no somos perfecta, la vida es muy corta y la infancia de los niños también, necesitamos dejar de cargar con culpas que sólo nos hacen que veamos mas nublado el día, si llueve, ¡pues saquemos el paraguas y vamos a saltar en los charcos!!
Así sea!!! Si te quieres buscar defectos los encontraras, por eso es mejor enfocarse como bien dices tú en lo que hacemos bien y sacarle el máximo provecho para maternar a nuestro estilo no al de tu mamá, al de la vecina, al de la abuelita o de cualquier otra. Toma lo bueno que creas que se adapta a ti y desecha lo que no va contigo de ellas.
Maravillosa reflexión Lety!!!
Saludos.
Me encantó esta nota! me sentí identificada 100%
Pues si Lety, las comparaciones no sirven de nada y además nunca podrían servir de nada, pues las circunstancias de cada quien son muy distintas y lo que se puede hacer con los recursos que se tienen a la mano también. Hay que hacer las paces con esas decisiones o acontecimientos que no nos agradan del pasado, hacer lo necesario para cambiar las cosas que molestan, apreciar lo que si nos gusta y disfrutamos en la vida y no perder de vista que hicimos lo mejor que podíamos, así no puede haber culpas.
Somos madres y estamos perennemente atacadas por nuestro entorno, estoy de acuerdo contigo en eso. Creo primeramente todas nosotras tenemos que empezar respetarnos unas a otras, porque aunque lo hagamos todo diferente, acaso el próposito no es el mismo? No lo hacemos con devoción hacia nuestros pequeños y para su bienestar?
Yo desde que soy madre he aprendido a hacerme la sorda, pues las críticas empezaron desde el principio, que le das el seno? Que dejaste el trabajo? Que lo porteas? Y simplemente vivo mi vida y como respeto a la mujer que trabaja y da biberon, desearía que me respetaran mis decisiones, pero si no lo hacen, como dije, ya me da igual, yo estoy en paz conmigo misma y se que lo que estoy haciendo es lo mejor para mi hijo 😉
Besos
Es necesario romper con los paradigmas, mirar desde un punto de vista personal sin mandatos, ni opiniones ajenas, no solo en lo relacionado con la maternidad si no también en lo que tiene que ver con la vida en general, conocernos conocer a nuestros hijos y saber que lo que hacemos, es con amor. Esto es fundamental si actuamos en la vida debemos actuar con amor y para bien, no pensando en lo que dirán, o en el efecto que va a producir en el otro, si no en esa necesidad propia de ser y hacer.
Gracias!!! Te quedo muy chulo Lety 😉
Fue taaaaan oportuno tu artículo, muchas gracias!!
Me encantó. Clarito y directo al corazón y a la razón.