En la actualidad hay una gran preocupación por llevar una buena alimentación, pero muchas veces vemos en artículos de revistas o algún otro medio de comunicación recomendandonos tal cantidad de alimentos exóticos y carísimos que sólo pueden conseguirse en tiendas especializadas, que parece sólo con este tipo de ingredientes podemos nutrir a nuestra familia y en ocasiones nos olvidamos de alimentos de uso más común pero con un gran valor alimenticio.
Esto pasa con la avena por ejemplo, yo confieso que soy una entusiasta de la avena y del amaranto, con mi hija mayor yo tenía menos información y mas bien hacía “lo que todos hacen” y cuando comenzamos la ablactación (comer alimentos sólidos) usé cereales comerciales, pero cuando nació mi hija menor tuve mas información y más experiencia, y cuando ella comenzó a probar alimento sólido uno de los primeros alimentos que probó fue la avena, hervida en agua sin azúcar ni nada (todavía tomaba leche materna y no tomaba nada de leche por supuesto) , y de ahí hasta ahora, por cierto una taza de avena es uno de sus desayunos favoritos.
La avena es un alimento básico en esta casa, la puedes añadir al yogurth (así en crudo, o dejarla remojar en la noche y en la mañana ya está suave, le añades frutas y listo, a mí me gusta con yogurth natural, tal cual ) o tomarla con leche como la avena tradicional, está lista en unos minutos y los niños quedan con un muy buen desayuno y rápido de tomar, a mi me gusta mucho porque en días fríos siento que toman algo calientito y nutritivo y no les da hambre tan pronto antes de la hora del recreo. La avena también puede usarse para empanizar, en lugar de pan mollido para tortitas de papa, o un pastel de carne por ejemplo, para hacer galletas, en licuados, como cereal, realmente es un alimento muy polifacético y una muy buena opción a los cereales industriales llenos de colorantes y azúcar.
La avena contiene fibra, vitaminas del grupo B, proteínas, y además tiene grandes beneficios, por ejemplo que baja el colesterol, reduce los niveles de azúcar en la sangre, lo cual es una buena noticia para los diabéticos, tiene entre otras vitaminas la vitamina B1 que ayuda al sistema nervioso, es benéfica para las mamás embarazadas y lactando, “Según un estudio de la Universidad de Columbia, los niños de entre 2 y 18 años los niños que comían avena eran 50% menos propensos a sufrir de sobrepeso, en comparación con aquellos niños que no la comían. Los mismos resultados pueden esperarse en los adultos.” Fuente http://avenacanada.com/index.php/beneficios-para-tu-salud.
En fin que con lo que leí mas convencida estoy de que es un producto que debe estar en todas las despensas y consumirse con frecuencia.
Además de la avena tradicional con leche caliente, canela y azúcar, hay muchísimas otras formas de consumirla, en este link hay recetas de unas deliciosas galletas de avena, atole de avena, leche de avena, hotcakes, tortitas de avena, etc.
