mi tormenta perfecta
Vida de mamá

Mi tormenta perfecta

Realmente he tenido una vida con retos, que me han hecho crecer al final, pero hace unos años pasaron varios eventos que se convirtieron en una tormenta perfecta para mí y mi familia y que nos obligaron a transformarnos sobre la marcha.

2020 fue un año para olvidar, durísimo para muchos, nuestra familia desde 2019 tuvo varios sobresaltos, con la hospitaización de mi esposo al ser mordido por una araña reclusa en la cara al voltear unas cajas haciendo limpieza en la azotea.

Aunque lo atendieron en el hospital Juárez, asumieron que lo que tenía no era por una araña y lo tuvieron días y días en una sala general haciéndole “pruebas” pero sin curarle ni hacerle nada en la cara, terminamos pidiendo el alta voluntaria, el tuvo la presión altísima todos esos días por el estress y el dolor, pero realmente no le supieron hacer nada.

Lo terminó atendiendo una enfermera especialista en heridas que lo vió por privado, gracias a la recomendación de mi cuñada, excelente su atención, quien quiera el dato se lo puedo pasar por privado. ella logró cerrar la herida tremenda que tenía en la cara y que nos confirmó que fue una mordida de araña.

Pasó este evento, todo esto implicó varios gastos para nosotros, el tiempo que mi esposo no pudo trabajar y merma en los ahorros mas el susto, esto pasó en julio – agosto, en noviembre otra vez carreras y sustos, mi suegra enferma, al hospital, ver que pasaba, terminamos enterándonos que tenía un cáncer avanzado ya en diciembre, por todas las situaciones decidieron que era mejor darle calidad de vida ya que sufririría mucho más con los tratamientos, ella nos dejó en marzo de 2020, pocos días antes de que se declarara la cuarentena por la pandemia.

La pandemia fue un tiempo muy pesado para todos, con lutos, miedo, incertidumbre, el trabajo de mi esposo era manual, obviamente dejó casi de trabajaralno ser seguro ir a casas de otras personas, él estaba deprimido y tenía varios síntomas que pensamos que era la depresión que vivía. En ese entonces yo todavía tenía clientas y proyectos con las que pudimos sobrevivir hasta diciembre de 2020.

Para eso a mi esposo le salieron valores alterados en sus análisis en noviembre, nos dijeron que eran problemas en los riñones, nos extrañó porque los análisis anteriores (antes de la pandemia ) habían salido relativamente normales (para un paciente diabético), sólo una vez el médico nos dijo que estaba tirando un poco de proteína en la orina pero nada grave, su hemoglobina glucosilada salía bien. pero tenía varios síntomas que de inicio pesábamos que era el encierro, el duelo, pero había más.

Esta vez nos mandaron a urgencias, lo vieron y nos dijeron que tenía problemas en los riñones, que sí estaban mal sus análisis pero no estaba tan grave como para ingresarlo, que estaban saturados por el COVID y que estuviera pendiente para que en cuanto volviera a haber consulta externa.

2021 iniciamos sin ingresos fijos, teníamos todavía la renta de un departamento que era un apoyo, pero en marzo-abril el inquillino decidió que no tenía dinero para pagar la renta y el señor decidió que no se iba porque no tenía dinero para rentar en otro lado y tampoco me iba a pagar la renta, terminó yéndose en septiembre, dejando el departamento hecho un asco, sucio, con desperfectos y adeudos de gas, luz y agua.

Todo ese año fue lo más difícil, entre la incertidumbre con la salud de mi esposo, sin ingresos, ya desde su hospitalización con lo de la mordedura de araña y lo de mi suegra me había descapitalizado, mas esta persona que no pagaba la renta y no se salía, mi esposo debilitándose, vomitando, sin dormir, un año muy muy lleno de retos.

En otros proyectos continué teniando ingresos, haciendo una y otra cosa, de alguna forma llegaban pero fue una época agotadora, por fin en julio de 2021 por fin pudimos conseguir cita en nefrología del hospital general, donde vieron sus análisis, le mandaron otros estudios y diagnosticaron insuficiencia renal terminal. Mi esposo necesitaría diálisis.

Fueron tiempos de estar yendo varias veces al hospital, lo internaron, le pusieron cateter para diálisis peritoneal, y comenzó la dilálisis intensiva. En el Hospitl General tuvimos suerte y una buena atención, él mejoró muchísimo con las primeras diálisis, pero teníamos que resolver cómo continuar porque en el hospital sólo le hacían diálisis cada 10 días (se tenía que internar ) y le hacían la diálisis intensiva, y eso al final sería mas desgastante para su cuerpo, mas el cansancio de análisis y estar ahí cada 10 días.

Mi madre consiguió que me dieran de alta en el IMSS para poder darle la atención a mi esposo, lo dimos de alta, lo llevamos a urgencias y comenzo su tratamiento, todo lo que implica el tratamiento es una serie de posts completos que mas adelante escribiré ya que la insuficiencia renal es mucho mas común de lo que creemos y hay muy poca información al respecto.

Parecía que ya estábamos logrando algo de estabilidad, pero en noviembre de 2021 mi esposo tuvo una hiperglucemia en la noche (se le bajó demasiado la glucosa),lo logré estabilizar, pero estoy casi segura que eso en algo lo descompensó y tuvo un desprendimiento de retina y hemorragia de ambos ojos semanas mas tarde.

Perdió la vista, tratamos de que lo vieran en el IMSS, lamentablemente en oftalmología el trato fue pésimo, salimos huyendo, se que no todos los médicos eon iguales pero los que estaban de guardia en esos días trataron a mi esposo muy mal, lo regañaron pro ser diabético, lo insultaron hasta que se cansaron, íbamos con el shock y el susto de la pérdida de visión y no esperábamos ese trato, salimos sin querer volver a poner un pie en el Hospital la Raza. (Ya actualizaré este post con los nombres de quinees lo trataron así, y escribireos más al respecto)

Ahora logramos que se afiliara al IMSS con la modalidad de persona trabajadora independiente para que siguera cotizando semanas y lograra jubilarse.

También logramos rentar el departamento con unos inquilinos que hasta la fecha han sido cumplidos y responsables.

En mayo de este año mi cuñada falleció inesperadamente, era la única hermana de mi esposo; fallece ella en mayo, para mi esposo y para todos fue un golpe que nos dejó en shock, era la madrina de mis dos hijas y el único familiar directo que le quedaba a mi esposo, todavía tiene tías y primos, claro pero si fue un evento que nos tomó demasiado desprevenidos.

En julio de este año (2022) lo operaron en otra institución, tuvimos que reunir el dinero, tratando de que recuperar la vista del ojo que mas visión tenía pero salió peor, desarrolló glaucoma y perdió definitivamente la visión. En julio lo operan y semanas mas tarde el perdió definitivmente la vista, desarrolló glaucoma en el ojo operado, el dolor del ojo era insoportable, la oftalmóloga nos dijo que es una complicación relativamente común dada su condición de insuficiencia renal, simplemente las cosas salieron así.

Parece telenovela, pero a veces las cosas pasan una tras otra. En este caso así nos pasó y nos costó mucho lograr mantener la cabeza fuera del agua, aunque recapitulando, de una u otra forma logramos hacer los pagos y compromisos que necesitamos, también recibimos ayuda de amigos y familiares que ha sido invaluable, mi esposo ha tenido una entereza increible y hemos permanecido unidos, a veces este tipo de situaciones, más una tras otra terminan en separaciones.

No digo que hemos permanecido sonrientes bajo la tormenta como si Fueramos los flanders, nos hemos desesperado, enfadado, llorado, cometido errores y clamado al cielo, y hemos encontrado que somos mas fuertes de lo que pensábamos, que teníamos mas recursos, y hemos aprendido, tanto quien si y quien no, como de quienes nos han dado ayuda incondicional de una forma increible y que nos hicieron sentir bendecidos.

En fin, si es un poco de desahogo, porque realmente han sido unos años que me hicieron probarme a mi misma. Debo confesar que si hubo días que me sentí muy desesperada, pero me seinto satisfecha de lo que he crecido.

Estoy convencida que mi enfoque de los negocios en femenino me ayudó mucho, el trabajar por mi cuenta me dió la flexibilidad de horario para poder sobrevivir mientras tenía que estar en urgencias y en consultas médicas.

Y cuandobuscas recursos sin cerrarte encuentras formas diferentes de hacer negocios y de generar ingresos.

Ahora creo que mucho de lo que he aprendido y vivido debo transformarlo en conocimiento para otras mujeres, tanto mi experiencia en crianza de mis hijas, una de las cuales ya es adulta, tanto como el emprendimiento ya que en estos años he abordado diversos negocios y puedo apoyarte para desarrollar tu idea de negocio o en aspectos específicos que necesites resolver, tanto técnicos como de organización o estrategia.

Así que vamos renaciendo y te´cuento todo esto por si un día sientes que no puedes más o que la vida te ahoga, todas nos hemos sentido así, muchas hemos vivido épocas especiamente complicadas y donde sentimos que no lo lograremos, yo he estado ahí y doy fe de que terminas saliendo de todas las situaciones, aunque te parezca que no le ves fin.

Cuentame, ¿has vivido alguna etapa especialmente complicada en tu vida?

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Leticia Jiménez
Bloguera y emprendedora, mamá de 2, autora de "Berrinches y rabietas para mamás imperfectas" "De esto no se habla, testimonios de violencia obstétrica" y "Mamá y papá también son pareja" disponibles en Amazon.
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