La Navidad de este 2020 definitivamente es una navidad diferente. Ha pasado mucho en estos meses y a estas alturas estamos cansados la mayoría.
En esta Navidad atípica hay familias que necesitan urgéntemente ponerse totalmente en mood navideño porque el año ha sido devastador, o que sus niñas y niños están ansisoso por la Navidad, o que disfrutan muchísimo esta época y contaban los días para sacar los adornos.
Otras familias precísamente por el cansancio y desgaste que han vivido, o por que ha fallecido algún familiar hace poco no están de ánimo para poner árbil ni luces, quieren que pase todo ya y olvidarse del 2020, ya es el último estirón.
Algunas deciden que los regalos de navidad los trae Santa Claus, o el Niño Dios, o cualquier ser que se les ocurra, o que los traen los Reyes Magos.
Otras familias deciden decirles a los niños que los regalos los dan los padres y tienen su propia manera de interpretar las fiestas navideñas.
Otras familias viven la Navidad en un contexto religioso y de fe.
Como sea que cada quien decida, procuremos ser empáticos. No sabemos que pérdidas o duelos tiene cada quien, no los ridiculicemos por llenar la casa de fantasía y “vivir una mentira” o decirles que “privan” a los niños de algo si viven la navidad sin seres de magia.
En esta Navidad todos tenemos duelos a cuestas, familiares, trabajos, proyectos, planes, procuremos dejar que cada quien pase este tiempo como mejor le siente. En estos tiempos estar juntos y con comida en la mesa y techo seguro ya es bastante bendición.